Por Ben Urich
Adrian Toomes, alias Vulture, cacareó sobre sus delitos en los tribunales. Nada más subir al estrado, Vulture echó las culpas a Spider-Man en vez de asumir su autoría. En su declaración, aseguró que el justiciero enmascarado era el "auténtico cerebro" detrás de sus viles acciones. El jurado no se tomó en serio a Toomes. Al fin y al cabo, todo el mundo sabe que Spider-Man fue quien capturó al pajarraco carroñero y se lo entregó a la policía.
Declarado culpable y con las alas cortadas, es evidente que este malhechor está que trina. Podrá seguir graznando sobre su inocencia desde su celda de máxima seguridad en la Balsa.
Harry Osborn apuesta por la sostenibilidad
Por Robbie Robertson
El alcalde Norman Osborn ha desvelado el nombre del genio científico que ha retomado el proyecto de investigación de su difunta esposa: nada más y nada menos que su hijo Harry Osborn. Estaba claro que el chico tenía madera de emprendedor.
El proyecto, considerado en su día como "inviable", ha suscitado el interés del joven Harry Osborn, que ha dedicado los últimos años a demostrar el potencial de los laboratorios ubicados en azoteas. Según los materiales distribuidos por Oscorp, estos laboratorios se construyeron para evaluar los niveles de contaminación del aire y supervisar los sistemas de depuración del agua, entre otras cosas. El ayuntamiento no ha dudado en concederle a Harry Osborn una jugosa subvención para su proyecto, que se ha convertido en la piedra angular de las iniciativas medioambientales de su padre.
Los expertos en la materia creen que estos laboratorios supondrán un cambio muy positivo para la ciudad de Nueva York, que puede convertirse en todo un referente en el uso de energías limpias y sostenibilidad.
La amenaza arácnida inspira a una nueva generación de justicieros
Carta al director de J. Jonah Jameson
La amenaza arácnida se nos ha ido completamente de las manos. Que los niños se vistan como él en Halloween tiene un pase, pero que hayan empezado a aparecer imitadores con disfraces cutres resulta alarmante. Es evidente que la proliferación de justicieros sin poderes de ningún tipo es otro de sus muchos efectos secundarios.
No se puede negar que llevar la máscara de Spider-Man tiene ciertas ventajas para estas personas, como que los simpatizantes de Spider-Man quieran hacerse fotos con ellos y les hagan regalos. El problema es que tarde o temprano se acabarán encontrando con uno de sus archienemigos. En el momento más inesperado, pasarán de saborear los perritos calientes que les compren sus seguidores a recibir una buena paliza de los numerosos rivales de Spider-Man.
Por eso os pido que dejéis la lucha contra la delincuencia en manos de los hombres y mujeres del cuerpo de policía. Tenemos más que suficiente con una sola amenaza arácnida. Lo último que necesitamos es un ejército de imitadores enmascarados molestando a los ciudadanos. ¡Y lo último que necesita ese spider-mocoso es más apoyo para seguir haciendo de las suyas!
El magnate inaugura una nueva torre y hace caso omiso de los rumores
Por Kat Farrell
Wilson Fisk ha regresado de su viaje a Japón con motivo de la gran inauguración de la Torre Fisk. El propio Fisk ha cortado la clásica cinta colocada en la entrada. Parece que le resbalan las últimas acusaciones que le señalaban como el verdadero Kingpin, el delincuente más peligroso de Nueva York.
Hace poco, el Daily Bugle informó en primicia del registro de las oficinas de Wilson Fisk debido a los rumores que lo relacionaban con Kingpin.
Las autoridades concluyeron que no había ninguna conexión entre Fisk y el crimen organizado de Nueva York. Por tanto, decidieron cerrar el caso.
Cuando le pedimos que hiciera declaraciones sobre dicho escándalo, Fisk se limitó a sonreír, dar un sorbo a su coñac y decirnos que habláramos con sus abogados. Mientras el empresario celebra la apertura de su flamante edificio, el comisario se ha puesto en contacto con la capitana Yuri Watanabe para acordar el protocolo que se seguirá en futuras investigaciones.
Martin Li, en primer plano
Por Ben Urich
Todos tenemos un pasado. A excepción, posiblemente, del empresario multimillonario Martin Li. El Daily Bugle ha investigado cómo se convirtió en el filántropo más querido de Nueva York.
Podría decirse que Li es el paradigma del sueño americano. Pasó por varios orfanatos de Manhattan en su infancia y más tarde se trasladó a China, el país de origen de sus padres. Casi una década después, reapareció con millones de dólares y el deseo de mejorar las cosas. Nada más llegar, inauguró los centros de acogida FESTÍN para asegurarse de que nadie se quedara solo o desamparado.
De no ser por la ausencia de máscara y disfraz, el misterioso pasado de Li sería prácticamente igual al de los héroes que luchan por la seguridad de nuestros barrios. Es más, Martin Li podría ser el héroe de a pie que estábamos esperando.
Spider-Man divide a la opinión pública
Por Betty Brant
Desde que comenzara a balancearse por Nueva York hará ya unos años, Spider-Man se ha labrado una reputación. La cuestión es si buena o mala. Su pequeño grupo de fans afirma que, de no ser por él, los malhechores habrían conquistado la ciudad hace tiempo.
Sin embargo, los más críticos opinan que es un tipo destructivo y negligente. "¡Por su culpa nos han subido los impuestos! Vaya héroe de pacotilla", ha declarado un anciano habitante de Manhattan visiblemente enfadado.
Uno de sus principales detractores es el alcalde Osborn, que se niega a creer que el Trepamuros esté de parte de la ciudadanía. Como dijimos en un número anterior, el alcalde está desarrollando varios planes para reducir nuestra cada vez mayor dependencia de Spider-Man.
¿Estamos listos para decir adiós a Spidey? ¿Dejaremos de necesitar (o de querer) su ayuda algún día?
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