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- Returnal™
El veterano estudio Housemarque (Resogun, Nex Machina, Alienation) llega a PS5 con uno de los títulos más ambiciosos que ha abordado nunca. Os contamos ocho aspectos en los que Returnal pone a prueba los límites del diseño, la tecnología y las mecánicas de juego en una nueva generación de hardware.
En el misterioso planeta Átropos os encontraréis con desiertos áridos, yermos glaciales y exóticos sistemas de cuevas, entre otras muchas cosas. El desarrollo de la historia os llevará por todos estos escenarios, donde os encontraréis con desafíos y peligros diferentes, así como especies totalmente nuevas de flora y fauna.
Átropos es un lugar en constante proceso de cambio: en él, los sitios que os encontraréis nunca serán iguales. Además, cada entorno presenta un ecosistema único con patrones climatológicos cambiantes, niebla densa, partículas que responden al contacto y una vegetación que se mueve a vuestro alrededor.
En el extraño entorno climatológico de Átropos, la muerte es una realidad inevitable y cíclica, a la que sigue el renacimiento de manera casi instantánea. Gracias a la potencia del streaming de PS5, podréis moveros fluidamente por este mundo alienígena extraño, saltando de manera instantánea entre puntos de transporte y desplazándoos entre regiones totalmente distintas en un abrir y cerrar de ojos.
Los anteriores juegos de Housemarque siempre se habían centrado en un espacio de juego “plano” —el movimiento lateral y en bucle de Resogun o el caos vertical de Nex Machina—, pero, con el cambio a una vista en tercera persona, Returnal ofrecía al estudio posibilidades inéditas. En Returnal nos abriremos paso saltando, trepando e impulsados por nuestro gancho para llegar a puntos de observación, estudiar el territorio alienígena y desbloquear zonas secretas.
Aunque los paisajes del juego son impresionantes, no es conveniente que os quedéis mucho tiempo admirándolos. Átropos está repleto de peligros y trampas. Planead vuestra ruta por el mundo con el máximo cuidado y preparaos para modificarla sobre la marcha para evitar las trampas que os encontraréis de camino a los escasos recursos del juego o para llegar a zonas ocultas tras superar complicados desafíos de plataformas.
A Housemarque siempre le ha gustado llenar sus mundos de juego con secretos —fases extra, armas o bonificaciones— y Returnal se mantiene fiel a esa tradición. Los recursos, elementos cruciales del juego, no estarán siempre a la vista: tendréis que cazar y recolectar, y construir armas y suministros, y no solo para sobrevivir, sino también para descubrir más cosas sobre la extraña realidad en la que estáis atrapados.
En el juego encarnaremos a Selene, una exploradora de ASTRA que queda varada en el planeta inexplorado de Átropos y debe recorrer entornos hostiles y desconocidos para tratar de escapar. Sin apenas recursos y con un conocimiento muy limitado sobre lo que nos rodea, tendremos que abandonar los restos de nuestra nave, la Helios, para ir en busca de una misteriosa transmisión conocida como la “sombra blanca”.
La historia de Selene combina el espeluznante horror cósmico de la exploración interestelar con una intrincada historia sobre viajes en el tiempo. El resultado es un relato de ciencia ficción de gran altura narrativa donde se entrelazan temas como el aislamiento, los traumas y la pérdida.
Sin más brújula que una señal de transmisión aislada, vuestro viaje os irá revelando un mundo que, al principio, se os antojará totalmente ajeno, pero que, poco a poco, y por increíble que parezca, empezará a revelaros visiones de vuestro propio pasado, en una suerte de juego mental que os ofrecerá el siempre mudable mundo de Átropos.
La historia de Selene depende totalmente de vuestro deseo de descubrirla. Los sucesos que desencadena su llegada a Átropos constituyen solo el comienzo: si exploráis el mundo de manera concienzuda, podréis descubrir sus secretos ocultos y desvelar toda la verdad de lo que os está pasando.
El original diseño de Returnal aprovecha dos de las características más consolidadas del diseño 2D, los tiroteos desenfrenados y la progresión tipo “roguelike”, para adaptarlas a una aventura vertiginosa en tercera persona donde el jugador tiene plena libertad para decidir y que combina la acción más espectacular con un argumento emocionante, digno de una superproducción cinematográfica.
Como buen “roguelike”, en este juego la muerte nos devuelve al principio, pero eso no quiere decir que tengamos que empezar desde cero. Perderemos algunos objetos y mejoras, pero otros seguirán con nosotros tras la muerte, transformados en poderosos beneficios permanentes.
Cada vez que volvamos a él, el mundo se habrá transformado de manera radical y nos ofrecerá obstáculos nuevos y totalmente diferentes. La transformación del territorio traerá consigo nuevas amenazas: astutas trampas, emboscadas enemigas, recursos ocultos y brutales enemigos de élite que se interpondrán entre nosotros y la salvación.
En Átropos encontraréis toda clase de armas, cada una con sus propios puntos fuertes, desde carabinas de fuego rápido como la buscavacíos, armas atronadoras y de cadencia lenta como el escupidor y pistolas reglamentarias con gran capacidad hasta incluso artefactos con poderes sobrenaturales como el conductor electrófilo.
Átropos es un planeta vivo, rebosante de amenazas: siseantes monstruos con tentáculos, centinelas de ojos rojos capaces de arrasar cuanto ven, bestias deformes que arrojan sus mucosidades a modo de armas, colosales monolitos bípedos... El peligro está por todas partes. Cada forma de vida constituye un reto propio. Algunas nos atacarán en picado desde el cielo, mientras que otras nos bombardearán con partículas o intentarán atraparnos con telarañas viscosas.
Conseguid e instalad “rasgos” únicos que añadirán nuevos y devastadores modos de fuego secundarios a vuestras armas. Interactuando con la extraña xenotecnología que encontraréis en Átropos, podréis desbloquear habilidades pasivas como “Contraataque explosivo” o recoger prácticos objetos consumibles como los “viales de escudo”. El planeta oculta elementos que os permitirán ir construyendo un arsenal sobre la marcha.
El gigantesco mundo de juego de Returnal hace uso de la sofisticada arquitectura I/O y el rapidísimo SSD de PS5 para ofrecer un renderizado del máximo detalle, con modelos y diseños de grandísima fidelidad que se cargan casi al instante.
El uso de los innovadores gatillos adaptativos del mando DualSense permite utilizar sistemas de ataque multifuncionales donde se pueden activar diferentes modos de fuego en función del nivel de presión aplicada.
Disfrutad de una inmersión aún más profunda al explorar Átropos gracias a la retroalimentación háptica del mando DualSense, que permite simular la sensación del barro denso bajo los pies o las gotas que caen sobre vuestro traje.
Disfrutad de la máxima inmersión y de una percepción del espacio sin igual en vuestro desplazamiento por el mundo gracias a un sistema de audio que tiene en cuenta tanto el entorno como la posición de los sonidos a vuestro alrededor.
El uso de unos efectos visuales muy llamativos, con un verdadero despliegue de pirotecnia de partículas por toda la pantalla, se ha convertido en la marca de la casa de Housemarque. La potencia de PS5 ha permitido llevar un paso más allá esta visión, con simulaciones completas de gran fluidez que controlan el clima y los entornos, junto a innovadoras animaciones de partículas para enemigos y escenarios.
Disfrutaréis de una iluminación ambiental de alta fidelidad diseñada específicamente para adaptarse al dinamismo de los entornos de Átropos.
Para Housemarque, la jugabilidad es la piedra angular de todo desarrollo, por lo que el estudio busca siempre los máximos estándares de rendimiento. La increíble potencia de PS5 permite recrear tanto el violento combate como el inquietante mundo visual de Returnal a 60 fotogramas por segundo y con resolución 4K.
Al morir, volveréis atrás en el tiempo, pero vuestros restos físicos quedarán atrás para que los descubran otros jugadores en sus propios mundos. Podréis obtener muchas cosas al registrar los cadáveres que os encontréis, pero debéis andaros con cuidado porque, en Átropos, la muerte no es siempre lo que parece.
Más allá de la campaña principal, podréis poner a prueba vuestras habilidades en originales desafíos diarios. En este modo de juego, diseñado de manera específica, tendréis que completar un único bioma en condiciones peculiares que, al limitar el acceso a armas y habilidades, os obligarán a cambiar vuestra forma de jugar y a improvisar.
La puntuación que obtengáis en los desafíos diarios quedará reflejada en las tablas de clasificación, donde podréis enfrentaros a vuestros amigos, establecer récords para que intenten batirlos o tratar de superar los suyos.
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